Las semillas son una parte esencial en la agricultura y el cultivo de plantas, ya que constituyen el inicio del ciclo de las plantas. Existen diversos tipos de semillas, cada uno con características específicas que las hacen apropiadas para diferentes condiciones y propósitos agrícolas.
En este artículo, exploraremos la clasificación de las semillas, los ejemplos más comunes y las diferencias clave entre los tipos principales, para ayudarte a elegir la mejor opción.
¿Qué son las semillas?
Las semillas son estructuras biológicas que contienen el embrión de una nueva planta. Se forman tras la fecundación de las flores y son las encargadas de asegurar la fertilidad de las plantas. En su interior, llevan todos los elementos necesarios para que la planta pueda crecer de forma adecuada. Las semillas son una de las formas más efectivas que las plantas han desarrollado para adaptarse a diferentes entornos y asegurar su supervivencia.
Clasificación de las semillas: Tipos principales
Las semillas se clasifican principalmente según su origen, su uso, su forma y su forma. La elección del tipo de semilla adecuado depende de factores como la región de siembra, el clima, el tipo de suelo y los objetivos de producción. A continuación, se presentan los principales tipos de semillas y sus características más importantes:
Semillas criollas
Las semillas criollas, también conocidas como semillas autóctonas, son variedades tradicionales que han evolucionado de manera natural en una región específica y han sido seleccionadas por agricultores a lo largo de generaciones. Estas semillas suelen ser más rústicas, ya que han desarrollado una adaptación natural.
Esta resistencia a las condiciones locales como el clima y las plagas las hacen potencialmente elegibles en agricultura regenerativa y agricultura ecológica. Suelen tener un rendimiento menor en comparación con otros tipos de semillas modernas.
Semillas híbridas
Las semillas híbridas resultan del cruce controlado de dos o más variedades de plantas para obtener características específicas, como mayor rendimiento y resistencia a enfermedades.
En los últimos años ha habido una tendencia en el uso de este tipo de semillas debido a su alta producción. Sin embargo, una desventaja es que las semillas obtenidas de los frutos de las plantas híbridas no mantienen las mismas características en generaciones posteriores, por lo que es necesario comprarlas nuevamente cada temporada. Esto es muy habitual en España en el cultivo de cereales como el trigo y la cebada, al obtener semilla certificada. El uso de esta semilla garantiza una buena producción anual, pero es necesario adquirirla cada año.
Semillas transgénicas
Las semillas transgénicas son aquellas que han sido modificadas genéticamente para incorporar genes de otras especies con el fin de mejorar ciertas características. El uso de semillas transgénicas permite crear resistencia a plagas o la tolerancia a herbicidas. Sin embargo, genera controversia por su impacto en la biodiversidad y el medio ambiente, así como por cuestiones éticas.
Un ejemplo es el uso de el Maiz Bt que se trata de una variedad modificada genéticamente para incluir un gen de la bacteria Bacillus thuringiensis (Bt), que produce una proteína insecticida.
Semillas Baby
Las semillas baby es un término utilizado en semillas de hortalizas que se recogen en una etapa temprana de crecimiento. Estas semillas tienen un crecimiento rápido manteniendo sus valores nutricionales, que un determinado momento detienen su desarrollo.
Otras clasificaciones de semillas
Además de los tipos de semillas más comunes que hemos visto, se pueden clasificar de la siguiente forma:
- Según su origen: criollas-autóctonas o mejoradas-híbridas.
- Según su uso: alimentarias, forrajeras, industriales y ornamentales.
- Según su forma: redondas, alargadas y planas.
- Según su tamaño: pequeñas, medianas y grandes.
- Según el tipo de planta: semillas de flores, de frutales, de plantas aromáticas, etc.
- Según su ciclo: de ciclo corto y ciclo largo.
- Según su ciclo de estación: semillas anuales, bianuales y perennes.
Diferencias entre semillas criollas o autóctonas y semillas híbridas
- Origen: Las semillas criollas son variedades locales seleccionadas naturalmente, mientras que las híbridas se obtienen mediante cruces controlados en laboratorio.
- Adaptabilidad: Las semillas criollas están mejor adaptadas a su entorno local, lo que les confiere resistencia a las condiciones de cada región, tanto en condiciones climáticas como de resistencia a plagas. Las híbridas, en cambio, son diseñadas para tener un rendimiento y mayor producción.
- Reproducción: Las semillas criollas se pueden reproducir cada año conservando sus características. En cambio, las híbridas no siempre mantienen las cualidades originales en las generaciones sucesivas.
- Coste: Las semillas híbridas suelen ser más costosas debido a los procesos de desarrollo y control que requieren.
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